La batalla de las televisiones

Además de la propia contienda del día 6 de noviembre en las urnas, otra de las batallas a las que los candidatos a la Presidencia en Estados Unidos deben hacer frente es a la de la pequeña pantalla; sobre todo en estados clave como Florida, Ohio, Carolina del Norte o Wisconsin. Y, en este caso, los anuncios, entrevistas y apariciones en reconocidos talk shows, se convierten en las únicas herramientas de ataque, defensa y promoción.

Según los números registrados hasta el momento, la campaña de 2012 va a ser la más cara de la historia en cuanto a gasto publicitario en televisión (con los llamados ads en inglés). Esta semana ya se llegado casi a los 600 millones de dólares de inversión en anuncios, según datos de NBC/SMG Delta. El equipo de Romney lleva gastados 313,6 millones, frente a los 284,1 millones de Obama. Unas cifras que hacen más realista el cálculo estimado por la consultora Kantar/CMAG que auguraba un gasto en conjunto de más de 1.100 millones de dólares hasta el día de las elecciones.

Al margen de los datos numéricos, la esencia de los anuncios también está este año subida de tono. Frente a los valores de esperanza y cambio que Obama popularizó en 2008 con vídeos musicales, famosos y compromisos, este año el tema central de los anuncios está siendo el ataque al oponente. Y después, la defensa a dicho ataque.

Sin embargo, estos ataques no sólo se centran en cuestiones o políticas personales. Para aprovechar el tiempo comprado, los equipos de cada candidato se fijan en varios aspectos: personas clave (mujeres, minorías, afroamericanos…), estados y ciudades decisivas y el ataque a su oponente.

Ejemplo de este esquema son dos de los anuncios lanzados esta semana. Desde el bando demócrata se ha emitido el anuncio Pay the bills en el que una ama de casa reconoce pagar todas las facturas para que no le falte de nada a sus hijos mientras Romney sólo piensa en los grandes empresarios y en recortarle los impuestos a los ricos. Mujeres, situación real y ataque a Romney.

Mientras que el equipo republicano sacó a la luz hace unos días el vídeo Dear daugther, en el que una mujer habla a su hija recién nacida explicándole la deuda de la administración Obama y los datos de pobreza y desempleo femenino que hay en Estados Unidos. De nuevo, mujeres, situación cotidiana y ataque a Obama.

Ya se han gastado 121 millones de dólares en Florida, 116,4 millones en Ohio, 89,1 millones en Virginia… Los votantes ya saben que cada lunes verán en sus pantallas nuevos spots de los candidatos. Lo que está por comprobar es si esta gran inversión en anuncios de ataque/defensa consigue mover al ciudadano o, por el contrario, lo desgasta.