“En el 2012 el Instituto Franklin de la Universidad de Alcalá instituía, felizmente, este Galardón Camino Real con la visión acertada de subrayar y promocionar el vínculo de nuestro país con Norteamérica a través de la biografía de compatriotas de nuestro tiempo reconociendo sus méritos y el ejemplo de su labor desarrollada allá lejos…” Estas palabras pronunciadas por S.M. Felipe VI en una anterior edición del Galardón Camino Real ponen de manifiesto el espíritu y vocación de este reconocimiento personal que el próximo martes recibirá en el Paraninfo de la Universidad de Alcalá, y de manos del Rey, el tenista Rafael Nadal. El Consejo Asesor del Instituto Franklin destacó en el acta de concesión que el galardonado “personifica las más altas cualidades de los deportistas: sacrificio, esfuerzo, juego limpio, humildad en la victoria y grandeza ante las adversidades; es referente obligado para la juventud por su honestidad, capacidad de superación, y respeto a sus rivales.” Debido a la pandemia este reconocimiento ha debido retrasarse dos años; en cualquier caso bienvenido sea.
Al instituir este galardón en el 2012, con motivo de su 25 aniversario, el Instituto Franklin-UAH pretendía escenificar las excelentes relaciones existentes entre los dos países de referencia, más allá de puntales acontecimientos, reconociendo a quienes en cierta forma actuaban de embajadores culturales, sociales, académicos… allende los mares. Desde finales del siglo pasado la alianza entre España y los Estados Unidos resulta de una relevancia que, me atrevo a aventurar, va incluso más allá de las relaciones estrictamente políticas. El eslogan “Yankis Go Home” que abanderó la izquierda antifranquista durante las décadas de los 70 y 80 en referencia a las bases americanas en suelo español, resulta hoy en día tan obsoleto como bisoño. La presidencia de Aznar supuso para algunos el momento cumbre de las relaciones bilaterales entre ambos países. Una relación que, también se ha escrito, se vio dañada por el desplante del presidente Rodríguez Zapatero a la bandera americana durante el desfile de las fuerzas armadas, o las cargas arancelarias impuestas por el presidente Trump a un buen número de productos españoles, como las aceitunas de mesa, que dañaron nuestra capacidad exportadora a aquel país.
La realidad, sin embargo, nos ha demostrado que los “daños colaterales” derivados de actuaciones políticas puntuales a uno u otro lado del Atlántico no han sido tan apocalípticas como desde ciertos voceros políticos de uno y otro signo pregonaban. Los Estados Unidos se han convertido en uno de nuestros socios comerciales más importantes tanto en lo referente a importaciones como exportaciones –el número de empresas españolas que mantiene relaciones comerciales con Estados Unidos supera las 700-. En el ámbito académico universitario entidades como la Asociación para el Diálogo y Estudio de las Culturas Hispanas en Estados Unidos, ponen de manifiesto la vocación colaborativa entre académicos de universidades americanas y españolas. También la sociedad civil ha tomado conciencia de la importancia con asociaciones como la Fundación Consejo España-Estados Unidos y su homónimo en los Estados Unidos con la US-Spain Council. El dinamismo de los estudiantes universitarios que amplían estudios en universidades de uno y otro país aumenta potencialmente año tras año –el Instituto Franklin-UAH recibe anualmente un número en torno a 500 estudiantes norteamericanos en estudios de grado y posgrado–. Tampoco se puede obviar que España es un socio de primerísimo orden para los Estados Unidos en su planteamiento de defensa geopolítica mundial tras la firma por los presidentes González y Reagan en 1988 del Convenio para la Cooperación de la Defensa, que incluía las bases de Rota y Morón, posteriormente enmendado y ratificado en el 2002, 2012 y 2015.
Es este “zeitgeist”, como referenciaba anteriormente, lo que el Instituto Franklin-UAH pretende poner de manifiesto con la concesión de este reconocimiento. La relevancia de Rafael Nadal, ganador de cuatro US Open –2010, 2013, 2017, y 2019– le hace dignísimo merecedor de tal galardón y es, al mismo tiempo, un orgullo para el Instituto Franklin-UAH poder incluir su nombre junto a la nómina de anteriores galardonados como el tenor Plácido Domingo, el doctor Valentín Fuster, el deportista Pau Gasol y el actor Antonio Banderas.
Vuelve a ver la Ceremonía de Entrega del Galardón Camino Real en el canal oficial de YouTube del Instituto Franklin-UAH haciendo click aquí.
