Aborto en Estados Unidos: de Roe al Cuento de la criada

manuel-peinado-aborto-da

El caso Roe contra Wade fue un litigio judicial que concluyó en 1973 cuando el Tribunal Supremo de Estados Unidos dictaminó que la Constitución protege la libertad de una mujer embarazada para elegir abortar sin restricciones gubernamentales.

El dictamen Roe acaba de ser anulado el 24 de junio de 2022. El Tribunal ha decidido, por una mayoría de seis a tres, mantener la prohibición del aborto en Misisipi después de las quince semanas de embarazo. Al hacerlo, los jueces han anulado dos sentencias clave que protegían el acceso al aborto: Roe contra Wade, de 1973, y Planned Parenthood contra Casey, de 1992, y con ello, después de medio siglo, ha anulado el derecho constitucional de las estadounidenses a decidir sobre su embarazo.

La novela de la canadiense Margaret Atwood The Handmaid’s Tale, llevada a la pantalla en la serie de televisión de HBO España con la traducción del mismo nombre, El cuento de la criada, se centra en el papel de sometimiento de las mujeres bajo el régimen dictatorial y fundamentalista de República de Gilead. Atwood, una autora que sabe que el arte imita a la vida, dice que su libro, un ejemplo de “ficción especulativa” –el subgénero que imagina un futuro que podría suceder sin ningún avance tecnológico que no esté ya entre nosotros–, se inspiró en los acontecimientos sociales y políticos regresivos de principios de la década de 1980 que llegaron de la mano de Ronald Reagan.

En la novela no se detalla explícitamente cómo Estados Unidos, considerado una de las cunas de la democracia contemporánea, se convirtió en un régimen represivo, inquisitorial y misógino. Pero a través de los recuerdos de June, la protagonista, el lector conoce cómo esa república teocrática y patriarcal comenzó con un meticuloso golpe de Estado ideado y ejecutado por los Hijos de Jacob, un grupo de inspiración fundamentalista cristiana que orquestó la transformación de Estados Unidos en una república teocrática. Infiltrados entre las sombras institucionales, se organizaron para provocar la caída de la democracia.

El cuento de la criada es una fabulosa obra de ficción que retrata un futuro distópico con pinceladas de tristeza y fatalidad que, sin embargo, parecen volverse cada vez más creíbles a medida que asistimos a cómo el populismo intenta recobrar una sociedad de orientación patriarcal.

Roe era un bastión de los derechos de las mujeres, pero con el nuevo fallo me temo que los viejos enemigos están de nuevo a las puertas. Me doy cuenta de por qué muchos creen que puede llevarnos a todos un paso más cerca de una nueva realidad que es paralela al sombrío futuro retratado en la República de Gilead. La caída de Roe crea una sensación de distopía que atraviesa nuestra sociedad y que nadie parece saber hasta dónde nos arrastrará.

 

Mapa: The Conversation, CC-BY-ND Fuente: New York Times

 

Hacer comparaciones con The Handmaid’s Tale es obvio, porque la novela refleja cómo la elección de Reagan como presidente inició el control del conservadurismo estadounidense por los influyentes lobbies apoyados por la derecha cristiana. Lo que vemos ahora tiene muchas semejanzas con lo que sucedió hace cuarenta años durante la administración Reagan. Tras la ola de feminismo de la década de 1970 apoyada por el caso Roe, los derechos de las mujeres comenzaron a crecer a principios de la década de 1980.

Sin embargo, la reacción de la Administración Reagan rompió las tendencias políticas del feminismo. Los estadounidenses fueron testigos de una década en la que los derechos femeninos volvieron a ser cuestionados, sobre todo en lo que se refiere a la planificación familiar. Una década retratada en The Eyes of Tammy Faye en la que comenzó a esbozarse el nuevo republicanismo, la derecha salvaje que se entregó a las fuerzas desreguladoras del capital y a las reguladoras de la moral, en especial a los deseos de ciertas iglesias como la evangélica.

En 2022 la reacción no ha llegado directamente del mandato presidencial. Esta decisión se ha gestado durante décadas. Hace treinta años, cuando se discutía el caso Casey, muchos expertos jurídicos pensaban que el tribunal estaba preparándose para revocar Roe. La Administración Trump culminó el proceso cuando logró que el poder judicial federal fuese invadido por una facción ultraconservadora como no se había visto en la nación en 75 años.

La sentencia que ha hecho caer a Roe no señala necesariamente el futuro distópico de Gilead. Puede ser aún peor. Podría retrotraer al país más de trescientos años atrás, hasta 1692 y el Massachusetts colonial, una época en la que el papel de las mujeres estaba siendo derogado por el abrumador ascenso del orden patriarcal.

Los Juicios de Salem que Arthur Miller llevó a los escenarios fueron un ejemplo de represión patriarcal. Las mujeres fueron privadas de sus derechos. La “domesticación” de la mujer no era más que esclavitud. Fueron despojadas de su identidad y su naturaleza primordial quedó reducida a la maternidad y la subordinación doméstica.

Los Juicios de Salem se contaron entre los sucesos más violentos y odiosos de ese proceso de negación y represión de las mujeres que provocó tales heridas en el subconsciente colectivo femenino que perduraron durante siglos y solo comenzaron a sanar en la década de 1970. Las últimas décadas del siglo XX vieron un regreso al equilibrio natural entre los principios femenino y masculino.

No hay que temer a la vida imitando a la ficción: la mayoría de las veces es al revés. En cambio, preocupa que el Tribunal Supremo de Estados Unidos decida emular las reglas del tribunal Oyer and terminer de Massachusetts. Espero que no estemos presenciando el principio del fin de todo lo que se ha logrado a medida que ascendíamos en los escalones de la igualdad favoreciendo los valores que acercan a la humanidad a la justicia y a la igualdad en lugar de promover una nueva época continuadora de una persecución milenaria destinada a degradar a la mujer y, con ella, a nuestra sociedad.

Posts Relacionados

Diálogo Atlántico
Preferencias de privacidad
Cuando usted visita nuestro sitio web, se puede almacenar información a través de su navegador de servicios específicos, generalmente en forma de cookies. Aquí puede cambiar sus preferencias de privacidad. Tenga en cuenta que bloquear algunos tipos de cookies puede afectar su experiencia en nuestro sitio web y los servicios que ofrecemos.